Fue desarrollado por especialistas del INTA a partir del compostaje de residuos orgánicos.
Un equipo de especialistas del INTA integrado por investigadores de Hilario Ascasubi, Balcarce y Bariloche, trabaja en la puesta a punto de una nueva estrategia de fertilización biológica: el pellet de compost.
Un fertilizante órgano-mineral elaborado a partir de residuos agrícolas cuya aplicación en trigo dio como resultado preliminar que rindiera un 19 % más en comparación con las fuentes de nitrógeno (N) y fósforo (P) inorgánico y que a largo plazo se podría usar en cultivos extensivos para devolver al suelo parte de lo que se extrae, de acuerdo a la economía circular de residuos agroindustriales, que apunta al reaprovechamiento y reintroducción de los residuos orgánicos en el ciclo de producción.
Además, el pellet de compost se aplica con máquinas convencionales de fertilización e incorpora mucha más cantidad de material orgánico por metro cuadrado porque tiene menos humedad; puede acopiarse y es fácil de transportar.
Y gracias a un convenio de vinculación tecnológica firmado con la Pyme Daasons S.A. –ubicada en el Parque Industrial de Bahía Blancas– los pellets pronto estarán disponibles para su comercialización.
Fuente: Prensa INTA.