Según consta en el informe 2017 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), en la región de la norpatagonia hubo un “aumento del 9% en la faena de bovinos y del 37% en la faena de porcinos”.
En ese sentido, como también afirman desde ese organismo nacional, que hoy transita por una delicada situación económica y estructural quizás buscada, informó que “el registro de estas actividades se realiza en los establecimientos de faena habilitados con tránsito federal en los que el SENASA desarrolla tareas de control y fiscalización de la inocuidad y calidad de las producciones”.
En el informa, también se incluye que en el transcurso de 2017, en Río Negro y Neuquén se faenaron poco más de 22 mil cabezas entre bovinos, porcinos, ovinos, equinos, caprinos, pollos, ciervos y jabalíes.
A partir del registro realizado, se calculó que en 2017 la fanea de bovinos ascendió a 138 mil animales contra 117 mil del año anterior, marcnado un aumento de más de 20 mil cabezas de ganado. En el caso de los porcinos, la faena significó más de 43 mil ejemplares contra los 36 mil registrados en 2016, aumentando la faena en 16 mil animales.
