Condiciones propicias para (evitar) los incendios

Difícil pensar en los incendios que afectaron toda la región cuando las temperaturas no superan un dígito. Difícil olvidarse del infierno que muchos productores vivieron hace pocos meses. Difícil no hacer nada en materia de prevención. ¿Quién se ocupará de organizar?

El sudoeste bonaerense, el este rionegrino y el sudeste pampeano, área de distribución del periódico Ecos de la Tierra, presentan características comunes desde el punto de vista ambiental, fitogeográfico, demográfico, entre otros, pero representan un rompecabezas de muy ardua configuración desde el punto de vista político: tres gestiones provinciales, que se multiplican en las administraciones distritales, con incumbencias de organismos que dependen de ministerios provinciales y nacionales diferentes, con escasa o nula coordinación entre ellos.
La denominada sociedad civil tampoco alcanza a configurar esquemas organizativos representativos que permitan la articulación de gestiones en beneficio de esas comunidades. Claro está, los intereses sectoriales no siempre conducen a la consecución del bien común. Las grandes distancias entre las localidades, la mala conectividad regional, la situación económica irregular de la mayoría de los pequeños y medianos productores, hacen el resto.

Encuentro regional sobre incendios de pastizales
Con todo, no son pocas las acciones que se llevan adelante para mejorar las condiciones organizativas en la región. Por caso, a mediados de mayo hubo una reunión en la Agencia de Extensión Rural (AER) Río Colorado de la que participaron técnicos de cuatro estaciones experimentales (Alto Valle, Anguil, Hilario Ascasubi, Valle Inferior, es decir, de las tres provincias) y de tres centros regionales (Buenos Aires Sur, La Pampa-San Luis y Patagonia Norte).
Cada Estación Experimental Agropecuaria (EEA) expuso sobre los acontecimientos ocurridos en el verano 2016/2017, concretamente en lo referente a la previsión de los incendios. Con diferente grado, cada una dio a conocer sus trabajos de teledetección y complementación con observaciones de campo, las articulaciones interinstitucionales y los obstáculos con que se enfrentaron a la hora de la prevención de los sucesos.
Por Valle Inferior participaron Daniela Echevarría, Daniel Bolla y Miguel Ángel Silva; por Ascasubi, Cristina Winschel, Josefina Marinissen y Juan Vanzolini; por Anguil, Pablo Vázquez y Mauricio Farrell. Por Río Colorado estuvieron Carla Roveglia (Grupo Crea), Santiago Villalba (Programa Ganadero Provincial) y el jefe de la AER, Rafael De Rossi.

Valle Inferior

Se aclaró que las observaciones no incluyen a los Departamentos de Pichi Mahuida y Avellaneda (los de mayor población bovina provincial) por razones jurisdiccionales de los Proyectos Regionales con Enfoque Territorial (Pret) y las AER involucradas que, de acuerdo al objetivo central de este encuentro, habrá que superar.
Luego de una experiencia en el pasado con el Comité Provincial de Luchas contra Incendios (Coplin), que desapareció por su propia inactividad, y que pasó de la órbita del Ministerio rionegrino de la Producción a la de Defensa Civil, ahora se está motorizando la radicación de un cuerpo especializado en la región del monte, denominado Splif (Servicio Provincial de Lucha contra Incendios Forestales). Desde allí se está generando un Proyecto de Investigación y Desarrollo (Pidiaern) desde donde se coordinen acciones distintos estamentos del Estado Provincial, como ser Catastro, la Secretaría de Ambiente, entre otras, junto a Ministerio de Agricultura nacional y el Inta.
En el análisis, los técnicos advierten que hay más superposición de responsabilidades que complementación, por no haber un mando unificado. Hay un sesgo hacia un enfoque de lucha contra incendios una vez que éstos se inician, y no de prevención. Se reconoce que no existe un mapeo definido de fuentes de agua y caminos de acceso para facilitar la lucha activa.
La EEA Valle Inferior emitió un aviso de alerta de incendios en noviembre de 2016, mientras que la EEA Ascasubi ya lo había hecho en agosto. Esta cuestión fue reconocida en su debido momento por los productores que hicieron oído sordo a aquellas previsiones.
En tanto, hay quienes consideran que la implementación de la Ley de Bosques en la Provincia de Río Negro se vuelve un obstáculo, dado que impide u obstaculiza las quemas controladas con lo cual se generan volúmenes significativos de material ígneo. Las últimas se realizaron en la temporada 2004/2005 y luego se suspendieron por el período de sequía que se presentó de 2008 en adelante.

Hilario Ascasubi
En el sudoeste bonaerense se está implementado un Sistema de Información y Alerta Temprana (Siat), que es un componente del Proyecto “Aumentando la Resiliencia Climática y Mejorando el Manejo Sostenible de la Tierra en el Sudoeste de la Provincia de Buenos Aires”, del Fondo de Adaptación al Cambio Climático.
Conforman el SIAT el Centro de Recursos Naturales Renovable de la Zona Semiárida (Cerzos), la EEA Ascasubi, la EEA Bordenave, la Universidad Nacional del Sur y el Servicio Meteorológico Nacional.
Así, la relevancia de los actores que confluyen en el Siat hace que sea un organismo técnico especializado, encargado de recolectar, procesar y analizar datos para comunicar y difundir información relevante para la toma de decisiones de los diversos actores intervinientes en los sistemas productivos de la región. Se pretende establecer un Sistema Regional de Monitoreo que ayude a reducir la vulnerabilidad al cambio climático y la desertificación.
La Provincia de Buenos Aires no tiene impedimentos respecto de las quemas controladas, situación que la Estación Experimental Agropecuaria tiene inventariada desde 1965 en cuanto a ubicación y número de focos de incendios y superficie quemada. La evaluación abarca una observación complementaria post-incendio para determinar la severidad de los daños causados en la biomasa a través de un “índice de severidad”, según bibliografía consultada al respecto.

Anguil
A esta altura, se comentó que en La Pampa, antes de la prohibición de las quemas, se había definido la realización de “picadas estratégicas” orientadas norte-sur, y que posteriormente se dejaron de mantener porque la misma Ley de Bosques impedía la quema, que en definitiva es la forma más económica de mantenerlas limpias.
Desde esta Estación se pasó de un primer sistema de teledetección que solo consideraba variables meteorológicas (temperatura, humedad, precipitación) a otro que se complementa con otros índices, tales como el de sequía, estabilidad de la atmósfera, y se correlaciona con las imágenes disponibles (acumulación de material fino, zonas arbustizadas, frecuencia de fuegos, último fuego) hasta dar con las que mejor predicción permiten, todo lo cual puede ser diferente de una región a otra.
Así fue que en marzo de 2016 ya había disponible un Informe del Inta sobre la peligrosidad de incendios de pastizales para toda la Provincia de La Pampa.

¿Qué hacer?
Estas exposiciones y debates permitieron identificar varios emergentes a abordar en lo inmediato, tanto desde lo local como desde lo regional y nacional.
Sin lugar a dudas, la cuestión comunicacional es central en materia de difusión, con la imperiosa necesidad de que se trabaje de manera conjunta entre los distintos organismos.
Días atrás se conoció que se está avanzando formalmente -con participación de las cuatro estaciones experimentales del Inta de Valle Inferior, Alto Valle, Anguil e Hilario Ascasubi- en un plan regional de alerta sobre incendios. “Estamos realizando un informe sobre prevención de incendios, es decir, vamos a contar con esta información varios meses antes de la temporada de fuegos (en verano, desde diciembre en adelante, hasta marzo). Se va a clasificar toda la zona de bosques de la provincia (de La Pampa), un trabajo que se hará en conjunto con las sedes del Inta de Río Negro y de Hilario Ascasubi”, explicó el investigador de la EEA Anguil, Pablo Vázquez, quien participa en el proyecto.
Este primer paso para la creación de un sistema regional de alerta de incendios y de estado del pastizal del Cardenal y el Monte Oriental, requiere del consenso de los aspectos metodológicos en la estrategia de prevención.
En las primeras conclusiones del encuentro realizado en mayo se identificó como obstáculo legal la Ley de Bosques, porque hasta ahora no está contemplado ningún tipo de flexibilización respecto de las quemas controladas, que actuarían como parte de la prevención, o porque la burocratización lentifica las solicitudes de construcción de picadas más allá de las dimensiones permitidas.
A su vez se ponderó el rol de los estados provincial y nacional a la hora de definir políticas activas hacia lo más visible, es decir, la lucha contra los incendios una vez que se producen. En el mismo plano de responsabilidades, las “picadas” que corresponde realizar sobre las rutas nacionales y provinciales, como en las vías férreas, otra manera de referirse a la ausencia de limpieza y mantenimiento.
También es importante contar con relevamientos en materia de pérdidas de infraestructura y hacienda, por el impacto económico.