Exponen la importancia de lechos biológicos

Según el diseño y los materiales empleados las también conocidas como camas biológicas pueden ser una alternativa simple y de bajo costo para retener y degradar residuos de fitosanitarios.

Las camas o lechos biológicos -también conocidos como biobeds- constituyen una respuesta concreta al problema de la contaminación de suelos y aguas por el uso inadecuado de productos fitosanitarios, generados en posibles derrames accidentales, durante el llenado del tanque de las pulverizadoras o del líquido de lavado de las maquinarias. Los materiales biológicamente activos (biomezcla) contenidos en el lecho, degradan los residuos y reducen sus niveles hasta la inocuidad para la salud humana y el ambiente.

Los lechos biológicos representan una alternativa óptima para el Valle Bonaerense del Río Colorado. Esta tecnología requiere un diseño específico para su implementación, según cada caso en particular. Profesionales de la Estación de Extensión Agropecuaria (EEA) INTA de Hilario Ascasubi junto a la Universidad Provincial del Sudoeste, el Cerzos y Conicet, establecieron las bases científicas y tecnológicas para esta adaptación, de acuerdo a las condiciones y necesidades locales. Con este objetivo se investigan los niveles de degradación en diferentes biomezclas, de los herbicidas más utilizados en la región, empleando residuos y materiales disponibles localmente. 

Este equipo de trabajo es pionero a nivel nacional en adaptar y utilizar este sistema simple y de bajo costo. El diseño de la unidad de experimentación adaptativa comenzó en 2018 y se construyó en el INTA Ascasubi en septiembre de 2021 con un doble propósito. Por un lado, la utilización de la cama debido a las actividades productivas de la Asociación Cooperadora de la Estación Experimental Agropecuaria Hilario Ascasubi (Acoopa) y las parcelas experimentales del INTA, y por otro, para promocionar y difundir la tecnología, no sólo hacia productores sino a otras instituciones que podrían replicar el modelo.

El lecho biológico instalado en el campo experimental del INTA facilita la divulgación de la construcción, del uso y mantenimiento del sistema. Además, representa una vía propicia para fomentar otros aspectos fundamentales en la adopción de las Buenas Prácticas Agropecuarias relacionados al uso responsable de fitosanitarios.

Fuente: Prensa INTA.