El Instituto de Suelos del INTA hace foco en las buenas prácticas de manejo que incrementen los niveles de materia orgánica.
La demanda mundial de alimentos genera presión sobre los recursos naturales utilizados en su producción y en especial en los suelos, como reservorio de nutrientes y sumidero de carbono.
En el marco del Día Nacional de la Conservación del Suelo -7 de julio-, el INTA y la Asociación Argentina de la Ciencia del Suelo (AACS) organizaron una jornada para abordar temas clave para su cuidado y la producción sostenible.
La preocupación por el cambio climático y sus consecuencias económicas, productivas, sociales y ambientales llevaron a una percepción del suelo en general y del carbono orgánico almacenado en particular, mucho más amplia que aquella de hace 30 o 40 años y como señaló Costantini director del Instituto de Suelos del INTA: “Aparece entonces el suelo no sólo como un sustento físico para la producción, sino también como un sumidero de carbono de importancia capital para mitigar los efectos de las emisiones.”; y agregó: “Recarbonizar los suelos agrícolas nos proporciona grandes ventajas, tanto en lo que concierne a las propiedades edáficas como por los beneficios ambientales que conlleva”.
Existen diferentes fuentes de información sobre el contenido de C de los suelos en la Argentina, pero el INTA y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación están desarrollando otro.
Herramientas que sirven a la aplicación de estrategias para recarbonizar para fijar la mayor cantidad de C de acuerdo al uso del suelo, pensar en un cambio de uso del suelo o integrar diferentes sistemas productivos, como mejorar las rotaciones de cultivos incrementando el uso de gramíneas, el uso de cultivos de servicio, el manejo integral de la fertilización, la rotación con pasturas para la agricultura y para la ganadería, la fertilización de pasturas, la intersiembra de pastizales, el uso de especies forrajeras de mayor producción de biomasa, etc.
Además de sistemas productivos que integran diferentes usos como los sistemas silvopastoriles, agroforestería y sistemas agrosilvopastoriles.
Fuente: Prensa INTA.