La Pampa ocupa el quinto lugar en producción de semillas

El ranking fue elaborado sobre la base de cantidad de bolsas de semillas producidas.

Según el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) y la Fundación Producir Conservando, La Pampa es el quinto distrito del país con mayor peso relativo del cooperativismo agrario medido en cantidad de bolsas de semillas producidas.

En esa jurisdicción hay tres entidades solidarias rurales cada 10 mil personas y solo es superada por La Rioja (5,10), San Juan (4,28), Córdoba (3,5) y Santa Fe (3,4). De las 35 cooperativas registradas en INAES, 22 son de acopio de cereales, 10 ganaderas, hay dos barracas laneras y una apícola, entre otras.

Las cooperativas agropecuarias realizan muy diversas actividades que van desde la producción agrícola, ganadera, reproducción o producción de semillas, actividad agroindustrial y lanera, apicultura, tambera, maderera, silvicultura, servicios, entre otros.

Las cooperativas dedicadas a los negocios rurales en la provincia son una herramienta de defensa de la producción y el patrimonio de los pequeños y medianos productores y por ende de la agricultura familiar.

Un indicador demostrativo de la base social es que En la Pampa el 91% de los productores asociados a una cooperativa agraria cuentan con menos de 500 hectáreas y la mitad de aquel porcentaje lo hace participando con menos de 100.

El actual stock de semillas que se comercializan en la región cosecha tras cosecha trepan a una suma estimada en más de 1,2 millones de toneladas (sólo es fiscalizada un tercio de ellas) marcando un crecimiento frente a la campaña anterior de un 5%. El trigo pan, maíz, girasol, sorgo, forrajeras y soja son las semillas de mayor relevancia comercial.

En inferior escala, con el centeno, avena blanca y amarilla, cebada cervecera y forrajera, como también la comercialización de semillas para los verdeos invernales (avena, centeno, triticales y vicias), los verdeos estivales (sorgos forrajeros, maíz, mijo común y moha de Hungría) y pasturas perennes (pasto llorón, alfalfa, festuca, agropiro criollo, cebadillas, tréboles de olor y trébol rojo).

Con respecto a los cultivos forrajeros pampeanos la mayor parte corresponde a la alfalfa y particularmente a la destinada a la producción de semilla fiscalizada. Pero sin dudas que el crecimiento de las cooperativas agropecuarias (en facturación hace varias años que superaron a las eléctricas) son la garantía de que el simiente de la producción rural haya posicionado a La Pampa como la cuarta de Argentina dentro de las 14 provincias que comercializan semilla fiscalizada.

Todo un logro muy poco conocido por estos lares ya que las cuatro multinacionales que operan en el mundo como Monsanto (ahora de Bayern), Syngenta, Dupont y Dow, si bien controlan el 60% del total de las semillas vendidas en la región, en ventas el movimiento cooperativo rural sigue ganando terreno y lucha por no pagar patentes tecnológicas por su uso propios dentro de su factor de producción tierra.

Fuente: La Arena.