Se plantea implementar estrategias de manejo y tecnologías para la carga en los suelos, aumentar la eficiencia en los sistemas de cría y cumplir con la demanda mundial de producción de carne.
Frente a las variaciones y reordenamientos del sector ganadero en el territorio nacional, los especialistas coinciden en los riesgos de la sobrecarga de los sistemas y la importancia de disminuir el impacto.
Sebastián Maresca -investigador del INTA Cuenca del Salado, Buenos Aires- aseguró que: “Tras el reordenamiento que sufrió la ganadería nacional en la última década con la expansión de agricultura, en especial de la soja, la Cuenca del Salado se convirtió en la región con mayor concentración de vacas de cría del país, con los índices más altos de procreo y destete”.
Esto crearía una situación de vulnerabilidad productiva, dado que se tiene la misma cantidad de hacienda que en 2008 y se le cedió a la agricultura el doble de superficie, incrementando la carga en suelos menos aptos y la vulnerabilidad de los sistemas ante contingencias climáticas.
Un reciente monitoreo de estado corporal realizado en el INTA Cuenca del Salado mostró que un 44 % de las vacas de nuestro rodeo llegan flacas al parto y eso lleva a fallas en la concepción y bajos índices de destete y por esta razón, se recomendó ajustar la carga en función de la oferta de forraje que se dispone o bien aumentar la producción de pasto para asegurar el mantenimiento de los vientres.
Otro aspecto básico a resolver serían los problemas sanitarios que afectan la fertilidad del rodeo, causan abortos y muerte neonatal de terneros, siendo la brucelosis y las venéreas las principales causas de aborto en rodeos de cría, por lo que es importante la vacunación y el análisis clínico anual del rodeo.
Para Maresca, también es claro que las situaciones de estrés hídrico muestran la vulnerabilidad de los sistemas sobrecargados y con bajo nivel de reservas forrajeras y respecto a si es posible soportar la carga actual, aseguró: “La Cuenca, a diferencia de otras regiones del país, tiene un gran potencial para incrementar sus índices de destete y de incrementar la carga”.
Según el técnico, sus condiciones agroecológicas permiten generar mucho más forraje del que hoy se produce en condiciones sostenibles, sin embargo, reconoció que: “En general, el incremento en producción de forraje y adopción de tecnologías básicas no acompaña el aumento de carga”.
Fuente: Argentina.gov.ar.