INTA y Senasa contra el pulgón amarillo en sorgo

En Argentina fue detectado por primera vez hace un año y es de las plagas más dañinas para el cultivo.

En enero de 2021 se registró el primer brote de pulgón amarillo en sorgo en Argentina y desde ese momento se ha expandido por varias provincias productoras, por lo que un equipo de investigación del INTA y el Senasa trabaja en diseñar una estrategia de control eficiente.

“Es poco lo que se sabe de este insecto”, aseguró el eferente de Protección Vegetal del INTA, Eduardo Trumper; pero confirmó que: “Está en marcha un trabajo interdisciplinario a fin de poder dar respuestas a esta problemática multiregional a la que se enfrentan los productores de Chaco, Santiago del Estero, Santa Fe, Entre Ríos, Salta, San Luis, Córdoba, Buenos Aires o La Pampa”.

Una de las líneas de trabajo desarrolla genotipos resistentes a la plaga, lo que es sustentable porque permite disminuir la frecuencia de controles químicos, aunque llevará unos 3 años de investigación.

Mientras tanto, hay materiales disponibles como alternativa; se trabaja en la evaluación de químicos, porque en Argentina no hay productos registrados para controlar la plaga y para responder rápidamente a la situación el Senasa hace una declaración de emergencia y aprueba –en carácter excepcional y provisorio– el uso de algunos ingredientes activos, siempre bajo la premisa de minimizar el impacto en la salud y el ambiente.

El pulgón amarillo es tan peligroso porque coloniza el cultivo cuando las plantas tienen dos o tres semanas, después se produce un aumento poblacional de hasta 50 pulgones por hoja y ese hacinamiento provoca una disminución en el valor nutritivo del vegetal que induce a las hembras a producir individuos alados que dispersan la plaga.

Fuente: Prensa INTA.