Las muestras se tomaron de quince variedades de avellanos para su futura multiplicación.
El avellano es una especie emblemática en Río Negro y el Valle Inferior, que se ha convertido en la principal zona productora de avellanas de país.
Se cultivan principalmente dos variedades: la ‘Tonda di Giffoni’, cuyos frutos tienen atributos industriales y la ‘Barcelona’, más apta para el consumo directo; pero existen otras internacionales de libre multiplicación que no se comercializan y podrían desarrollarse en esta región y otras zonas del país.
El Programa Vivero de Frutos secos de la Norpatagonia busca incentivar la producción de nuevos ejemplares, por lo que se obtuvieron quince muestras de ejemplares madres radicados en el INTA Estación Experimental Valle Inferior, que fueron enviadas al laboratorio de INTA Mendoza para descartar la presencia del virus ApMV (Apple Mosaic Virus) e identificar los ejemplares que podrán ser reproducidos.
Un proyecto para el que se creará una línea de financiamiento a través de Rio negro Fiduciaria SA, ajustada a las necesidades de los productores y expandir la actual producción con las nuevas variedades de avellanos y a futuro incorporar nogales, almendros, entre otras.