Por la prevalencia del fenómeno La Niña la lluvia será escasa en buena parte del país y eso se extenderá hasta el otoño.
Las temperaturas estivales y el déficit hídrico cobraron protagonismo, aunque los especialistas insisten en que todos los veranos presentan períodos similares.
Según Roberto De Ruyver –director del Instituto de Clima y Agua del INTA-: “Cualquiera sea el fenómeno que lidere –Niño o Niña–, el verano nunca se escapa de tener una cierta cantidad de días en los que se combina una ola de calor sin precipitaciones. Pasa todos los veranos y es normal”.
De todos modos, destacó que: “No todo el país sufre lo mismo, hay zonas con excesos locales en La Pampa y buen contenido de humedad en los suelos del sur de San Luis, extremo sur de Córdoba y el oeste noroeste de Buenos Aires, en donde hubo marcadas precipitaciones”.
El último informe del Instituto de Clima y Agua del INTA Castelar aclara que no se esperan precipitaciones significativas hasta mediados de enero, sin embargo, podrían ocurrir lluvias y tormentas de variada intensidad de manera aislada y las temperaturas continuarían siendo elevadas sobre el centro y norte del país.
Mientras tanto, en el Océano Pacífico como en la atmósfera se muestran condiciones Niña; la temperatura superficial del agua en la región NIÑO 3.4 del Pacífico Ecuatorial indica anomalías negativas y se espera que el ENSO continúe en fase fría con intensidad entre débil a moderada durante el verano austral.
Fuente: Prensa INTA.