Energía verde para las poblaciones rurales

Los biodigestores son ideales donde la energía es escasa, costosa y los residuos generan un problema para la calidad de vida de los pobladores.

Existen riesgos ambientales cuando no se tratan apropiadamente los residuos, como la contaminación del aire por emisión de gases de efecto invernadero; de las napas o los cuerpos de agua superficial por la descarga inadecuada de los efluentes, que son evitables con el uso de biodigestores.

Según explica Mariano Butti, investigador y especialista en energías renovables del INTA Pergamino –Buenos Aires–: “Es una tecnología de aprovechamiento de la biomasa húmeda que contribuye a la sustentabilidad y sostenibilidad de los establecimientos, que presenta innumerables beneficios ambientales, económicos y sociales”.

Los productos de la biodigestión son dos: el biogás y el digerido, pudiendo este último sustituir total o parcialmente los fertilizantes inorgánicos que se utilizan en la producción agropecuaria.

Al respecto, la plataforma del Instituto Nacional de Educación Tecnológica brinda talleres, cursos y seminarios para productores, docentes y público interesado del país, resultando en experiencias como la de la Escuela Rural Nº 6253 “José de San Martín” de Runciman en Santa Fe, que contó con la participación activa de diferentes actores locales, se concretó en un biodigestor que procesa 20 kilogramos de residuos al día y genera hasta 1000 litros diarios de biogás usados para la cocción de alimentos, calentar leche para los terneros, producir chacinados, esterilizar frascos, producir dulces y conservas y sirve de aprendizaje a los estudiantes.

Fuente: Prensa INTA.